Una de las grandes confusiones es creer que las funciones de la domótica y de los altavoces inteligentes, como Alexa o Google Home, son lo mismo. Sin embargo, tienen propiedades diferentes que permiten facilitar la vida a los usuarios. Aquí te platicamos más sobre las diferencias.
Domótica
Viene de la palabra latina «domus», que significa casa. Aquí se encuentran la tecnología de la información y la electrónica que permiten que un hogar se vuelva «inteligente». Es una excelente herramienta que nos permite controlar sistemas, dispositivos y la automatización del hogar con el objetivo de aumentar la calidad de vida y comodidad de los usuarios.
Un edificio o un hogar comienza a desarrollar su propia inteligencia cuando conjuga la integración de la tecnología con la manera en la que puede satisfacer las necesidades de los usuarios.
¿Para qué se usa?
Cada edificio y cada hogar tiene procesos que realiza de forma rutinaria. Por tanto, existen hábitos repetitivos o situaciones similares que se pueden automatizar fácilmente. Algunos ejemplos de ello son: encender las luces para iluminar escaleras y apagarlas cuando no hay nadie cerca, o bien, encender y apagar las luces cuando no hay nadie en casa para simular que está ocupada o apagar automáticamente el aire acondicionado cuando baja la temperatura, controlar las cámaras de seguridad. La domótica es un sistema integrado para hogares y para edificios, como hoteles, que brinda al usuario final una gran comodidad y que le aporta altos estándares de seguridad.
¿Y qué hacen los altavoces inteligentes como Alexa o Google Home?
Los altavoces inteligentes se han vuelto muy populares y hay una gran variedad en el mercado, como Alexa y Google Home.
Los altavoces inteligentes nos permiten hacer una variedad de cosas diferentes, desde controlar las luces inalámbricas hasta pedir productos y comida para llevar en línea, así como proporcionar información como el pronóstico del tiempo, la hora, la fecha, e incluso pueden transmitir música a los altavoces. De hecho, por ello se denominan como asistentes virtuales.
¿Cómo funcionan los altavoces inteligentes?
La clave del funcionamiento de los altavoces inteligentes es la tecnología de reconocimiento de voz que utilizan, mediante ello es posible que entiendan lo que se dice y actúen en consecuencia.
Diferentes marcas han lanzado sus propios sistemas de reconocimiento de voz: Apple usa su asistente de reconocimiento de voz Siri; Microsoft usa Cortana; Google con su serie Google Home y los altavoces de Amazon, como Alexa.
Cada sistema de altavoces inteligentes es diferente, la mayoría escucha lo que se les dice y esperan una palabra de activación predeterminada, por ejemplo: para Amazon, la palabra Alexa activa el sistema, aunque también se puede cambiar por otras.
Una vez que el sistema escucha esta palabra, se activa, registra lo que se dice y lo envía por Internet al área de procesamiento principal o al servicio de reconocimiento de voz del sistema, descifra lo que se le dice y luego envía una respuesta al altavoz inteligente.
A diferencia de la domótica, cuyos sistemas está integrados para desempeñar acciones de manera automática, los altavoces inteligentes requieren de indicaciones para poder actuar conforme a lo que se les dice.
Otra de las grandes diferencias entre la domótica y los altavoces inteligentes radica en la seguridad que brinda cada sistema. Las funciones de la domótica están sistematizadas, a diferencia de los altavoces inteligentes, que detectan las indicaciones y que actúan conforme a ellas. La primera brinda una mayor seguridad al usuario, pues tiene control de cómo se desempeñará las actividades en el edificio, ya sea en el hogar o en un hotel.
Ambas son excelentes opciones para poder convertir tu hogar o edificio en un espacio inteligente.
